lunes, 1 de agosto de 2011

Todo lo bonito tiene un desagradable final.

Y hoy todo ha acabado, y me demostraste que el amor que yo un día decidí entregarte no significó nada para tí. Los besos, las caricias, los te amo y las noches en las que me quedaba abrazada ti solo fueron perdidas de tú tiempo, pero en cambio para mi fueron los momentos más precisos y más felices de toda mi vida, solo por el simple hecho de que los viví a tu lado. Quizá hoy he comprendido que el sentimiento del amor, no está hecho a mi medida. No logro comprender como salí de tú corazón tan rápidamente o quizás es que nunca llegué a entrar en él, no se cómo puedes estar dándole cariños y diciéndole esas palabras tan bonitas a otra mientras yo estoy trazando un plan para conseguir olvidarte. Aunque ahora mismo pienso que me va a ser un poco imposible. Y saber que yo fui aquella chica a la que la regalaste tú primera vez, y no sabes el daño que me hace saber que todo eso se ha terminado. Pero yo no te puedo suplicar más que yo sea la niña de tús ojos, que sólo tengas interés en mi, que por mucho qué te diga tu vas a hacer lo que el corazón te dicte y está claro que tú corazón no te dicta que me ames sólo a mí. Y se que me tengo que convencer a mi misma de que me tiene que dar igual si tienes detrás a un millón de niñas mejores que yo, porque por mucho que lo intenten se que absolutamente nadie va a amarte todo lo que te he amado y te amo yo. Y me muero por decirte todo ésto, pero no tengo la suficiente valentía para oírte decir un no te amo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario